Falta ya casi nada para brindar el 31 a la noche, cuando llega sin pedir permiso y con entusiasmo un flamante 2024 con su impronta de borrón y cuenta nueva. Es un buen momento para que hagas reflexiones y sueñes con lo que anhelas. Tengo 4 consejos que deseo probar en carne propia y compartir para motivarnos juntos a emprender cosas nuevas y lograr resultados mucho mejores. ¡Nos lo merecemos!
Aunque suene muy trilado, sigue plenamente vigente: Fomentá una actitud positiva. Esto es válido tanto para lo que quieras emprender en tu vida personal como profesional, que veo como dos caras de la misma moneda que se retroalimentan. Acepta dónde estás parado hoy en tu vida para tomar conciencia de lo que deseas cambiar y poder actuar. Como dice la frase, “aceptar es el punto de partida y resignarte el de llegada”. Sos vos quien eligís entre las dos actitudes. 1 de enero: Imagina que estás en la cancha, comenzando a jugar un nuevo partido de paddle ya punto de sacar. Tu mejor actitud para ganar es estar totalmente presente, con visión de 360º y apuntando a tus objetivos con foco.
Planifica por escrito lo que soñas lograr. Tomá el teclado y escribí tus metas. Si no lo haces, solo tienes ideas en el aire que todavía necesitas aterrizar. La especificidad de tus objetivos te permite planificar y marcar un antes y un después. ¿Qué quiero alcanzar con mi familia, amigos, trabajo, deportes, pasatiempos y equilibrio de vida?; ¿Hacia dónde me motiva apuntar profesionalmente y de qué estoy harto?; ¿Qué quiero aprender nuevo este año para renovar mi aire y ampliar mi panorama?; ¿Dónde tengo solidez para poder afirmarme y en qué áreas tengo dificultades?; ¿Qué número de clientes, nivel de facturación, mercados, monto de resultados, posición laboral, estilo de liderazgo me gustaría lograr?; ¿Cuáles son las acciones que necesito tomar hoy, esta semana, este mes, este año? Regístralos en un Excel, CRM, cuaderno o donde prefieras, con tal de hacer un seguimiento metódico que te permita contrastar el deseo con la realidad.
Preguntate, ¿De qué me sirve seguir pensando así sobre esos “no puedo”? Muchas de las barreras que te frenan la construyes con tus propios pensamientos limitantes. Son ladrillos que cortan tu horizonte. Está bien tomar distancia de ellos para verlos en perspectiva y cuestionarlos a fondo. Respira hondo y acomete con ganas contra los ladrillos que tal vez te protegieron alguna vez pero ya no te sirven. ¿Qué hay para perder? Sin embargo, seguro que puedes ganar mucho. En el coaching ontológico hay una frase madre muy fuerte: “acción mata juicio”. Si deseas apartarte de roles en los cuales te victimizás para buscar lo que quieres, anímate a actuar.
Amplía y construye tu red. Los nodos más importantes de cualquier red son aquellos que logran tener más puntos de conexión con otros. Todos podemos recibir un pelotazo, pero con otros lo aguantás mucho mejor. Preguntate: ¿Cuáles son tus conexiones en las cuales te podés apoyar y también dar sustento a otros contra viento y marea? Esas son tus conexiones vitales. ¿En qué áreas de mi vida estoy viviendo sin mucha roja? Si te desplazas hacia las conexiones con otros en tu plano profesional: ¿Son estas coherentes con tus metas?; ¿Qué necesitas aprender para apuntalar allí donde estás precisando?; ¿Sentís que desplegás todo tu potencial con otros o estás “guardado” por preferir pasar desapercibido antes de exponerte?; ¿Sos tal vez demasiado propositivo y te falta escucha?; ¿Qué podés hacer activamente para ayudar a otros a sumarse a tu red?.
Somos Ricardo Cavanagh y Pablo Jorge Pereyra Iraola, socios en nuestra consultora de empresas Integritas Team,. Trabajamos sobre estos y otros frentes de forma individual y con equipos. Nos motiva despertar nuevas acciones y resultados. Nos gusta trabajar con líderes y empresas con objetivos duros y blandos, ya que todos tomamos decisiones en base a ese combo que somos, donde lo personal y profesional se entremezcla todo el tiempo. Ojalá estas líneas te hayan podido sumar alguna mirada nueva que puedas aprovechar.
¡Felices Fiestas, Feliz Navidad y 2024!